Ya me dijeron que mi Blog suena un poco nostálgico, yo insisto en que no es verdad aunque pensándolo bien a veces tiene tintes de serlo. Y es que ante la oleada de calor que ha invadido Madrid en los últimos días y que inclusive a veces no permite dormir, la lluvia de Verano que refrescó el domingo pasado resulto muy bienvenida. Me recordó que en el pueblo de mi papá, en este mes empiezan los arroyos, se empieza a acumular agua y grandes cascadas llenan piscinas naturales que incitan a bañarse y a pasar todas las tardes ahí, siendo parte de la naturaleza y oyendo el agua que cae.
Me acuerdo por ejemplo, que cuando tenía 11 años me fui con mis tíos a Nayarit un mes (la primera vez que me iba tanto tiempo fuera de casa). Casi a diario realizaba una caminata de más de una hora junto con mis primos para poder bañarme en un arroyo que estaba en el pueblo vecino, el arroyo de la puerta.
martes, 7 de agosto de 2007
Arroyo de Verano
Publicado por jorge a. en 9:02